La defensa de los derechos, la libertad y la seguridad de las mujeres, junto a la implementación de políticas por la igualdad de género son reivindicaciones que a pesar de estar asumidas por la inmensa mayoría de los ciudadanos y ciudadanas, requieren de una constancia en su demanda, pues es mucho el trabajo aun por hacer y muchas las desigualdades que es necesario superar. Desde una perspectiva local por supuesto, pero también desde una óptica global, ya que mientras existan desigualdades y violaciones de derechos por el mero hecho de ser mujer en cualquier lugar del mundo, la lucha por la igualdad estará plenamente justificada.
No son pocos los datos que avalan la necesidad de mantener estas reivindicaciones:
La tasa de desempleo en el 4° trimestre de 2020 ha sido de un 14,2% entre los hombres y de un 18,3% entre las mujeres.
- Con datos del Foro Económico Mundial de 2019, el salario medio de las mujeres era un 12,2% más bajo que el de los hombres.
- En España, en 2020, cada mes se han denunciado más de 1.000 agresiones y abusos sexuales y las cifras de violaciones grupales crecen.
- Según la macroencuesta de violencia contra la mujer, el 34,9% de las mujeres residentes en nuestra región ha sufrido violencia machista a lo largo de su vida.
En Pozuelo de Alarcón, casi todas las fuerzas políticas representadas en el pleno hemos estado de acuerdo en este objetivo, y se intenta desarrollar instrumentos para avanzar en la igualdad. Este compromiso, tradicionalmente se ha canalizado a través de una Declaración Institucional, desafortunadamente VOX ha roto esa normalidad. Negar la realidad solo contribuye a invisibilizar los problemas y por tanto perpetuarlos.
Por estas razones, desde el grupo municipal socialista, hemos propuesto que el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se le dé el nombre de una plaza o glorieta de alguna de las principales avenidas a Emilia Pardo Bazán, como ejemplo de necesaria puesta en valor de mujeres con una importante relevancia en su tiempo.
Pardo Bazán fue no solo relevante en su tiempo como prolija y exitosa escritora, sino también como docente y pensadora y fue también una de las primeras mujeres que en España defendió los derechos de las mujeres, reclamando tanto la necesidad de su educación en un tiempo en que no se daba, como iguales derechos y oportunidades.
[Artículo de Ángel González Bascuñana para el Vive Pozuelo de Marzo de 2021]