Los Presupuestos 2016 han sido aprobados por el Pleno del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón en una sesión en la que las fuerzas políticas de la oposición pudieron exponer sus enmiendas y propuestas gracias a la formulación de votos particulares de la oposición al dictamen de la Comisión de Presupuestos durante la que el PP rechazó todas las enmiendas de los distintos grupos.
Las 36 enmiendas defendidas por el Portavoz socialista Ángel González Bascuñana durante su intervención hubieran permitido mejorar Pozuelo de Alarcón, corrigiendo las profundas desigualdades que vive la ciudad “más rica de España”, donde, como recordó Bascuñana, se produce una de las mayores desigualdades del país (2ª ciudad más desigual de España según un reciente informe de FEDEA), es decir, conviven rentas altísimas en algunas zonas, con situaciones de pobreza y vulnerabilidad extrema en otros núcleos, desigualdades que no son admisibles en una sociedad solidaria. Máxime cuando estamos hablando de una ciudad en la que el Ayuntamiento tiene dinero porque hace varios años que no se gasta el dinero presupuestado por las distintas concejalías, lo que quiere decir que se deja trabajo sin hacer.
Bascuñana resaltó durante su intervención que el Presupuesto 2016 aprobado por la mayoría absoluta del Partido Popular “No es un presupuesto para reequilibrar Pozuelo, No es un presupuesto para hacer un Pozuelo sostenible y No es un presupuesto que mire porque los jóvenes se queden.”
“La función reequilibradora que deben tener los presupuestos no se cumple en este caso, se sigue insistiendo en considerar la política social como una prebenda caritativa y arbitraria de la Concejalía de familia, sin atender a la necesidad de establecer una política de derechos que garanticen unos mínimos básicos. Una política social que no se entiende como garantía de derechos no produce reequilibrios, no reduce la desigualdad, la perpetúa.”
“Tampoco aprovecha el tejido asociativo de nuestro municipio, (…) un tejido asociativo que mantiene la identidad del municipio, a pesar del proceso de desidentificación que sufre Pozuelo (…). Hubiera sido positivo observar más medidas presupuestarias para impulsar la sociedad civil organizada.”
“Son unos Presupuestos que evidencian la falta de pasión por el gobierno de la ciudad hasta en los instrumentos de gestión, trasladando a empresas externas el 68% del presupuesto destinado a gasto corriente y servicios, en una dejación de la tarea de gestión municipal.”
Con estas políticas ha afirmado: “Seguiremos siendo la ciudad más rica y también la más desigual”.
Se pierde además “la oportunidad de cohesionar Pozuelo, de agregar una ciudad que ha crecido desagregada” por el modelo urbanístico que ha aplicado el PP, “gran derrochador de recursos y que genera islas dentro del municipio, que provoca dependencia absoluta del vehículo privado, un modelo que se aleja de las referencias europeas que deberían ser nuestro ejemplo a seguir: ciudades que ponen en segundo lugar la libertad de uso del coche respecto a la necesidad de respirar sano.”
“Tampoco es un presupuesto que mire por los jóvenes, particularmente por procurar que se queden en el municipio, como muchos de ellos desean, pues hay una ausencia absoluta de planes de vivienda social. Se sigue en la idea de expulsar a nuestros jóvenes, aquellos que han nacido aquí, que aquí se han desarrollado, que quieren a Pozuelo. Este presupuesto los expulsa y mientras tanto deja a la ciudad sin identidad. Los presupuestos 2016 tratan a Pozuelo como si fuese un distrito de Madrid, no como a una ciudad con historia y con un futuro propio”.
Insiste Bascuñana en que “Mejorar Pozuelo es Posible” reforzando su identidad a través de un urbanismo integrador, entendiendo la ciudad como un todo con posibilidades de interactuar y generar riqueza, con proyectos comunes a través de la cultura o el deporte. Y sobre todo, incorporando a los jóvenes a estos espacios a través de una política de vivienda social bien planificada.”